No me voy a andar con rodeos.
Después de muchos eventos como maestro de ceremonias, puedo decirlo con certeza: solo hay 5 cosas verdaderamente importantes para presentar a alguien en un evento. Y aquí te las comparto:
1. Pronuncia Su Nombre Correctamente
Este es un error más común de lo que creemos. Antes del evento, asegúrate de saber cómo se pronuncia correctamente el nombre del orador. Pregunta directamente si tienes dudas y, si es necesario, escribe la pronunciación fonética en tus notas. No hay nada que descoloque más a un invitado (y a la audiencia) que comenzar con una mala pronunciación.
2. Mantenlo Breve y Preciso
La presentación no es sobre ti, sino sobre el orador. Investiga detalles clave que sean interesantes y que despierten la curiosidad del público sin robarle protagonismo. Evita anécdotas personales largas, a menos que aporten valor al contexto del evento. Una historia corta y relevante puede ser poderosa, pero debe ser manejada con cuidado para no desviar la atención.
3. Utiliza la Estructura T.I.P.
Para mantener una estructura efectiva en tu presentación, utiliza el formato T.I.P.:
- Tema: Introduce brevemente la temática de la intervención.
- Importancia: Explica por qué el orador es relevante en ese tema.
- Ponente: Ofrece un par de detalles sobresalientes sobre su trayectoria o logros más relevantes.
Por ejemplo:
“Hoy tenemos el honor de recibir a una experta en Inteligencia Artificial que ha revolucionado el sector de la tecnología en Europa. Su trabajo ha sido premiado en múltiples ocasiones, y hoy nos compartirá sus ideas sobre el futuro de la automatización. Por favor, recibamos con un cálido aplauso a… ¡María López!”
4. Crea el Ambiente Perfecto
Más importante que cualquier lista de premios o títulos es tu capacidad para preparar el ambiente adecuado. Tu misión como maestro de ceremonias es lograr que la audiencia esté enfocada y receptiva. Esto puede incluir algo tan simple como pedir que silencien sus móviles al inicio o asegurarte de que la sala esté en silencio antes de presentar. Un ambiente adecuado es el mejor regalo que puedes ofrecerle al orador.
5. Cierra Fuerte con el Nombre del Orador
El nombre del orador debe ser lo último que digas. Termina tu presentación con un aplauso enérgico y una pausa dramática antes de anunciar su nombre. Un simple cambio de “Os dejo con Luis García” a “Recibamos con un cálido aplauso a… (pausa)… ¡Luis García!” cambia completamente la energía en la sala.
Después de decir su nombre, abandona el escenario de inmediato. Si te cruzas con el orador, estate atento por si te saluda, pero no lo fuerces. Tu trabajo ya está hecho.
Conclusión
Estos consejos te ayudarán a que la presentación de cualquier ponente sea fluida y memorable. Pero si aún no lo ves claro y prefieres que un profesional se encargue, contáctame. Como maestro de ceremonias con experiencia, me aseguraré de que tu evento no solo sea fluido, sino inolvidable.